Cómo organizar una boda en primavera

Si te vas a casar y la fecha escogida para ese día especial se sitúa entre el 21 de marzo y el 20 de junio, debes saber que estás organizando una boda en primavera, con las características que este tipo de enlace conlleva. Así, desde la elección de jardines, vestuario, el protocolo de organización, los arreglos florales y hasta los colores que utilices, deberán estar marcados por esta alegre estación. Para ello, te contamos cuales son las características principales de una maravillosa boda primaveral:

1. Los jardines

Uno de los elementos más importantes es la elección del espacio donde vais a realizar la ceremonia. Así, los jardines del Hotel Cigarral El Bosque, te ofrecen no solo un espacio amplio, cuidado y bello, sino también unas hermosas vistas al centro histórico de Toledo, así como una serie de servicios que marcarán las diferencias con otros lugares. Destaca su enorme terraza para colocar las mesas, su bella piscina exterior, que aporta vistosidad al ambiente, pasando por la privilegiada ubicación del hotel, situado en una de las más antiguas casas señoriales de esta zona. También incluye otros servicios como aparcamiento gratuito o conexión Wi-Fi.

No hay nada en una boda de primavera como la elección de una recepción al aire libre y en plena naturaleza, con espacio exterior para disfrutar de cada momento tan especial.

2. Arreglos florales

Si vas a organizar tu boda para estas fechas no puedes olvidarte de un elemento tan decorativo y agradable como son las flores. Existen numerosos tipos de arreglos florales y alegres centros de mesa que aportarán frescura y estilo a los espacios. Te recomendamos utilizar flores propias de la época como los claveles, rosas, tulipanes, peonias, hortensias u orquídeas.

3. Colores utilizados

Al ser una boda primaveral, todos los colores serán también grandes protagonistas. Hablamos de la decoración del ramo de novia, las invitaciones, flores, manteles y hasta los vestidos de las damas. En estas fechas los colores que mejor combinan son tonalidades suaves y alegres propias de la primavera, como el lila, azul cielo, verde, naranja, fucsia o verde y amarillo.

4. Vestimenta de los novios

El vestuario de ambos también formará parte de las características de una boda primaveral. Así, en el caso de ella, el vestido deberá estar elaborado en telas vaporosas, finas y con transparencias . Los vestidos largos son los más habituales en cualquier celebración y siempre combinan, pero si eres una novia alternativa, puedes innovar con un vestido corto o corto por delante y largo por detrás. Para el novio, también se recomiendan las telas claras e incluso, estampados. Además, podrá conjugar los tonos de la boda con los de la corbata y el boutoinere.

En definitiva, si tu boda es en primavera, inunda de luz y color todo el evento, te aseguramos que te fascinarán los alegres tonos de este hermoso día.

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